Querido Leo:

No espero ni pido que me entiendas, y mucho menos que me creas, pero sé que mañana ocurrirá algo extraordinario.















miércoles, 14 de septiembre de 2011

run baby run




























Cuando gozaba del privilegio de ser una mocosa de seis años, sin ataduras ni preocupaciones, Solía jugar a trepar por el haya que habitaba el jardín trasero de mi casa. Trepaba hasta que la copa del árbol se estrechaba, y las ramas eran demasiado delgadas para soportar mi peso. Subir hasta ese punto me permitía ser la única persona del planeta que gozaba de esa perspectiva de la ciudad. Mis ojos no alcanzaban la extensión de ésta, pero podíComprobar ortografíaa ver las minúsculas personas que correteaban por las calles. Los trajeados padres que llevaban a sus hijos al colegio, y se despedían de estos con un beso en la mejilla, o los abuelos que se asean para salir de casa, y dedicarse a pasar las horas sentados, en algún bulevar, mirando a la nada y reviviendo los recuerdos de antaño.Los enamorados que preferían alejarse de la multitud para un encuentro más placentero.


Pero mis favoritas, personalmente, eran aquellas que caminaban sonrientes por la calle, ayudaban a cruzar los pasos de cebra a las señoras mayores, o dejaban sitio a embarazadas en el autobús, personas que disfrutaban ayudando a los demás, y las que contagian su sonrisa al mundo. Ese tipo de persona, que soñaba con ser algún día.
( y ahora debería de aparecer el enlace de Jonquil- infinity, pero nose como se hace, asique os lo dejo a vosotros)






Desde la ventana de mi habitación alcanzo a ver un bosque, que sus raices alcanzan la mayor parte de la montaña que tengo delante. Todos estos árboles lucen un aspecto primaveril, de densas hojas de un color verde oscuro. Pero hay un haya que está envejeciendo, es más sensible que los demása los cambios de temperatura, y sus hojas están marrones, casi amarillas.
En aquel lugar extraño, oscuro, atrapado bajo el agua, un hombre se esforzaba por digerir que ésos, serían sus últimos instantes de vida.Dentro de poco dejaria de existir...Todo lo que era...o había sido...o sería...se acababa. Cuando su cerebro muriese, todos los recuerdos almacenads en su materia gris, junto con todos los conocimientos que había adquirido, se desvanecerían sin más en un mar de reacciones químicas.
En ese momento el hombre se dio cuenta de cuán insignificante era dentro del universo. Era la sensación más solitaria y humilde que había experimentado en su vida. Notó que el punto crítico se aproximaba y casi dio gracias a Dios. Había llegado su hora.
Sus pulmones expulsaron los últimos restos de aire viciado y se hundieron, dispuestos a aspirar. Así y todo, el extraño aguantó un instante más, su último segundo. Entonces, como quien ya no es capaz de resistir con la mano sobre una llama, se abandonó al destino.
El acto reflejo se impuso a la razón.
Sus labios se abrieron.
Sus pulmones se dilataron.
Y el líquido entró a borbotones.
El dolor que sintió en el pecho era mayor de lo que jamás había imaginado. El líquido abrasaba a su paso hacia los pulmones. De ahí se irradió en el acto hasta el cerebro, y fue como si le estrujaran la cabeza en un torno. Sintió un ruido atronador en los oídos. Percibió un destello de luz cegador. Seguido de negrura. Y así, el hombre dejó de existir.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

lemon

No te estaba robando a ti, le robaba al sistema, lo que pasa es, que tu cardigan es más bonito que el suyo.

martes, 6 de septiembre de 2011

Open your eyes, close your ears, close your ears open your eyes.
Listen to the words you see, you are blind to what you hear, listen to the words you see, do not fear the truth beneath,reach for foots beneath the trees.Listen to the words you seek.Don´t listen to a word you´ve heard. People are people we live for own.Live how you think not by why you´ve been told.